Se suele considerar el 13 de enero de 1824 como la fecha de la fundación de la Policía Nacional. Ese día, Fernando VII promulgó un Real Decreto creando la “Policía General de Vigilancia y Seguridad Pública”. La primera de sus funciones, que hoy nos resulta sorprendente, era “formar padrones exactos del vecindario de los pueblos del Reino”. Cumpliendo esta norma, en febrero de 1829 se redactó la “Matrícula del número de vecinos que tiene esta villa” de Espinoso del Rey. Se trata de un cuaderno de tamaño cercano a nuestro actual DIN A-3, con sus hojas cosidas y en buen estado de conservación, del que tenemos dos ejemplares iguales. Aunque los conocidos como “Censos de la Policía” no suelen considerarse todavía documentos estadísticamente fiables, no cabe duda de que aportan mucha información, sobre todo para lugares pequeños como este.

Echemos un vistazo al interior. El documento está firmado por “el alcalde, encargado de policía” Vicente Fernández. Los vecinos se ordenan por calles y por número de casa: calle de la Pasadera, de la Huerta, de Olivares, del Rollo, Ancha y Acirate (un acirate es una “loma que se hace en las heredades y sirve de lindero”, según el DRAE). De cada uno, además del número de su casa y de su nombre, se especifica su edad, su estado, su ocupación, su lugar de nacimiento y el tiempo que lleva residiendo en Espinoso, con un espacio para posibles observaciones, aunque no se realiza ninguna. Como se trata solo de un recuento de vecinos, no se detalla cuántas personas viven en cada casa.
!["6. Luis Sánchez Rubio. 62 [años de edad]. Viudo. Jornalero. [Natural] de esta villa. 62 [años de residencia en ella].
"Antonio Labrador, 20 [años]. Casado. Mozo de labor. De esta villa. 20 [años de residencia].
"7. Miguel Caules. 79 [años]. Casado. Pobre miserable. de esta villa. 79 [años de residencia]".](https://ahpto.files.wordpress.com/2023/01/21966_19_005a.jpg?w=1024)
Por supuesto, no podemos aquí hacer un estudio completo del documento, pero sí nos fijaremos en algunos detalles. El vecino más joven es Lorenzo Alonso, que vive en la calle de la Huerta, tiene 23 años, es “mozo de labor” y nació en la misma villa (puesto que afirma que lleva también 23 años viviendo en ella). Tenemos también a Antonio Labrador, de 20 años y de la calle del Rollo, de la misma ocupación, pero este vive junto con Luis Sánchez Rubio, viudo de 62 años, quizá su padre o algún pariente. Los más ancianos son María Rivera y Miguel Caules, ambos de 79 años y residentes en la calle del Rollo; ambos son también calificados como “pobre miserable” y, mientras que María es viuda, Miguel todavía figura como casado. Da la casualidad de que el más viejo y el más joven vivían en casas contiguas y aparecen listados justo uno detrás de otro
!["1º. Don Clemente Giménez Hervás. 53 años. Cura párroco. [Ocupación:] el de su ministerio. De Arenas. 30 años [de residencia]
"2º. Félix Agustín Ruiz. 45 [años]. Casado. Escribano del número y Ayuntamiento. De Pueblanueva. 15 [años de residencia]
"15. Martín Bermejo. 61 [años]. Casado. Pobre ciego. de esta villa. 61 [años de residencia]".](https://ahpto.files.wordpress.com/2023/01/21966_19_002a.jpg?w=1024)
En cuanto a las profesiones, la más abundante, con diferencia, es la de “jornalero”, con 47 vecinos. Le siguen 22 labradores y 18 madereros. De la importancia que tenía la explotación del monte da fe no solo este número de madereros, sino también los seis carboneros o incluso un “celador de montes”. Son muy abundantes los “pobres”, hasta 21 vecinos, a veces con algún calificativo añadido, como cuatro “miserables”, un ciego, un impedido y una pordiosera. Es significativo que siete de los nueve vecinos mayores de 70 años son calificados como pobres. En el otro extremo en la escala social el pueblo cuenta con dos sacerdotes, un escribano y un cirujano. Solo los dos eclesiásticos y el cirujano merecen el calificativo de “don”.
!["1º. Francisca Maqueda. 54 [años]. Labradora. De San Martín de Valdeiglesias . 24 [años de residencia]".](https://ahpto.files.wordpress.com/2023/01/21966_19_003a.jpg?w=1024)
Las únicas mujeres que podían ser vecinas eran las viudas. Hemos contabilizado 19, de las que 14 son calificadas de “pobres”; además hay tres labradoras, una cuya ocupación reza “de su clase” y otra de la que no consta ocupación. Esto significa que el 90 % de los pobres del lugar son mujeres. La gran mayoría de ellas son naturales del pueblo y solo hay una labradora que es de San Martín de Valdeiglesias y una “pordiosera” que procede de Navalucillos; ambas llevan más de 20 años residiendo en Espinoso. Solo constan dos varones solteros: Juan Muñoz, jornalero de 58 años y Bernardo Crespo, albañil, de 38. Todos los demás varones son casados o viudos.
!["14. María Sánchez Ramos. 68 [años]. Viuda. Pobre. De esta villa. 68 [años de residencia].
"Don Carlos Cortés. 47 [años]. Eclesiástico. [Destino:] el de su clase. De Alcuéscar. 01 [años de residencia]"](https://ahpto.files.wordpress.com/2023/01/21966_19_006a.jpg?w=1024)
La inmensa mayoría de los vecinos son naturales del propio Espinoso del Rey. Hay 16 forasteros, pero entre ellos se cuentan las “fuerzas vivas” del lugar: los dos sacerdotes, el escribano, el cirujano y el sacristán. De ellos, solo el escribano vino de un lugar relativamente cercano, La Pueblanueva; los otros proceden respectivamente de Arenas de San Pedro, Alcuéscar (sin duda, el más exótico), La Guardia y Cenicientos. Junto a ellos hay que señalar la ya citada labradora que vino desde San Martín de Valdeiglesias. Finalmente, diremos que hay cuatro vecinos recién llegados, con apenas un año de residencia: el cirujano, uno de los sacerdotes, un “sirviente” y un jornalero, seguidos del tendero (dos años) y el “traficante”, que lleva tres años en el lugar.