BIBLIOTECAS MUNICIPALES Y BIBLIOBUSES

Las bibliotecas públicas forman parte del paisaje cotidiano de nuestros pueblos y ciudades. Solo en la provincia de Toledo existen 148 bibliotecas públicas, para un total de 204 municipios. Aunque hay municipios con varias bibliotecas, está claro que la inmensa mayoría de toledanos tiene cerca una biblioteca pública. Incluso cuando no hay biblioteca propiamente dicha, el servicio de bibliobuses garantiza que cualquier ciudadano pueda acercarse a la lectura sin alejarse de su casa. Pero importa recordar que no siempre ha sido así.

De acuerdo con este artículo de Roberto Soto, suele considerarse a las famosas Misiones Pedagógicas impulsadas por la II República el antecedente remoto de los bibliobuses, al menos por su intención, aunque lo cierto es que el primer servicio regular no se inauguró hasta 1953 en Madrid, orientado hacia los barrios y localidades de su extrarradio. Sin embargo, las circunstancias políticas y también algunos errores de concepción hicieron que estos primeros y escasos servicios entrasen en decadencia en los años posteriores. En 1973 se decidió impulsarlos de nuevo, y esta vez la iniciativa correspondió a Toledo, donde debe reconocerse la labor de Julia Méndez, por entonces directora de su Biblioteca Provincial. Como vemos por este documento, ya al año siguiente la flota se amplió con dos nuevos vehículos, bendecidos por el cardenal Marcelo González. No sabemos si la mano arzobispal tuvo algo que ver, pero el caso es que esta vez el sistema funcionó.

4023_1_003

Pero, como decimos, la mayor parte de los municipios tienen su propia biblioteca, aunque en verdad esta presencia ubicua es muy reciente. La Estadística de Bibliotecas Públicas de Castilla-La Mancha informa de que en 1979 existían 18 bibliotecas en nuestra provincia, 10 de las cuales se habían creado a partir de 1960. Desgraciadamente, no detalla la ubicación de estas bibliotecas, pero podemos suponerlas situadas en las localidades más grandes, en especial Toledo y Talavera de la Reina. En diciembre de 1979 el entonces “entre preautonómico castellano-manchego” asumió las competencias en materia de gestión y coordinación bibliotecaria. No es casualidad que precisamente entonces empiecen a aparecer en nuestro archivo los expedientes de construcción de bibliotecas municipales, financiadas todavía por el Estado pero con el evidente impulso de la naciente “preautonomía”. Hasta se editaron folletos divulgadores, como este de la biblioteca de Consuegra, fechado en 1980, con una fotografía del mural que presidía su salón de actos. En estos folletos era habitual también incluir los planos del nuevo edificio, como vemos en el caso de Corral de Almaguer, de 1979.

El Estatuto de Autonomía de agosto de 1982 amplió estas competencias a la práctica totalidad de las bibliotecas de la región. A partir de ese momento sería ya la Junta de Castilla-La Mancha la que dirigiera y financiara la construcción de bibliotecas municipales. Gracias a ello entre 1980 y 1999 se crearon 104 nuevas bibliotecas en nuestra provincia: cinco veces más que en toda la historia anterior. Si añadimos que desde 2000 a 2012 se han puesto en marcha otras 26 bibliotecas, no podemos menos que reconocer la responsabilidad directa de la Comunidad Autónoma en la introducción de las bibliotecas como parte del paisaje habitual de nuestros pueblos y ciudades.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s