EL PUEBLO MÁS PEQUEÑO DE ESPAÑA

Muchos de nosotros pasamos parte de nuestras vacaciones en pequeños pueblos que reviven en verano, pero que quedan prácticamente abandonados en invierno. Y el debate sobre la despoblación de la España interior se ha reanimado en los últimos meses. El post de hoy lo queremos dedicar a estos pueblos pequeños que mantienen una lucha heroica por conservar su identidad propia.

El “top” de los pueblos más pequeños de España lo componen los siguientes lugares: Cerveruela (Zaragoza), Salcedillo (Teruel), Castilnuevo (Guadalajara), Jaramillo Quemado (Burgos) y Villarroya (La Rioja). Estas localidades han sido en algún momento, desde 1996 hasta hoy, el pueblo más pequeño de España. Pero sobre todas ellas reina, sin duda, Illán de Vacas, en la comarca de Talavera de la Reina. Este municipio ha sido sistemáticamente en todos estos años el que menos habitantes censados tiene, y así continúa, según las estadísticas del INE; solo cedió su liderazgo en 2003, 2015 y 2016. Además, en 13 de los 21 años contabilizados en esta serie ha mantenido su primera posición en solitario. En 2013 llegó a tener un solo habitante y en 2017 cuenta con cinco. Eso sí, que estén censados allí no significa que realmente vivan en el pueblo. Pero las cifras son las cifras.

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Al margen de curiosidades estadísticas, las autoridades siempre han intentado fusionar estas localidades con otras cercanas, por motivos de eficiencia y eficacia administrativa. Algunas veces lo consiguen pero otras, sorprendentemente, no. Es el caso de Illán de Vacas. En diciembre de 1989 la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha decidió su anexión a alguno de los municipios cercanos y para ello pidió a la Delegación del Gobierno un informe completo de las circunstancias del municipio. El informe se terminó en marzo de 1990 y recomendaba sin dudas la anexión a Los Cerralbos. Tanto la decisión política como el informe técnico eran taxativos pero, por algún motivo que desconocemos, la anexión no llegó a producirse.

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Algunos años antes, en 1984, el Ministerio de Administración Territorial había estado buscando información sobre los municipios que funcionaban en régimen de “concejo abierto”. Estos municipios son aquellos que, por su escasa población, no pueden tener un Ayuntamiento formalmente constituido, y toman sus decisiones en reuniones abiertas de todos los vecinos. Como es lógico, Illán de Vacas era —y es— uno de ellos. El Gobernador Civil realiza un informe breve pero preciso en el que detalla cómo funcionaba el “concejo abierto”. Las reuniones se celebraban en alguna casa particular o en la Casa Consistorial de Los Cerralbos, y solo cuando es absolutamente necesario, “es decir, dos o tres veces al año, como máximo”. Las convocatorias se hacían de boca en boca, sin formalidades, y las decisiones, hasta esa fecha, siempre habían sido por unanimidad, puesto que participaban entre cuatro y cinco vecinos que, según se nos dice, son aproximadamente un tercio del total de la población.

Nos podemos hacer una idea del aspecto del pueblo en esos años a través de las dos fotografías aéreas que se realizaron en 1990 para la confección del Catastro. En la primera podemos comparar el tamaño de Illán de Vacas con Los Cerralbos, que por entonces contaba con unos 480 habitantes. La segunda es una ampliación que nos permite apreciar cómo el pueblo consta de apenas cuatro o cinco construcciones, que, a grandes rasgos, se mantienen hoy en día en pie. Para finalizar, digamos que en nuestro archivo conservamos cuatro fragmentos de protocolos notariales de esta localidad, fechados entre 1684 y 1715.